Desde las costas colombianas hasta las mesas más exigentes, los sabores del océano son celebrados con fervor. La cazuela de mariscos, con su riqueza de ingredientes y su caldo profundo, es una oda a la generosidad del mar.
Al servirse, este plato evoca el abrazo salado del océano. La cazuela de mariscos es más que una comida, es un viaje sensorial que trae consigo la brisa marina y el murmullo de las olas en cada cucharada.
Ingredientes:
- 500 g de camarones pelados
- 500 g de calamares en anillos
- 500 g de filetes de pescado cortados en cubos
- 200 g de conchas
- 200 g de mejillones
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 3 tomates maduros
- 1 pimiento rojo
- 1 taza de crema de leche
- 1 taza de leche de coco
- 1/2 taza de cilantro fresco picado
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Modo de preparación:
- En una cazuela grande, sofreír la cebolla, el ajo, el pimiento y los tomates con aceite de oliva hasta que estén blandos. Agregar el pescado y los calamares, cocinando por unos minutos.
- Incorporar los camarones, las conchas y los mejillones, seguido de la crema de leche y la leche de coco. Cocinar a fuego medio-bajo hasta que los mariscos estén listos. Añadir sal, pimienta y cilantro al gusto.
Consejos para mejorar la cazuela de mariscos:
La frescura de los mariscos es crucial; adquirirlos el mismo día de su preparación garantizará el mejor sabor y textura. Un fondo de pescado casero puede realzar la profundidad del caldo, brindando una base más rica y compleja. El equilibrio en el cocinado de cada marisco es vital; añadirlos en etapas, según el tiempo que requieran para cocinarse, evitará que algunos queden sobre cocidos mientras otros crudos. Por último, una pizca de azafrán o unas hebras de hinojo marino pueden añadir un toque distintivo y sofisticado que elevará este plato a nuevas alturas culinarias.